La germinación del trigo es muy rápida, tan solo se necesita que las semillas en la tierra reciban agua y en menos de una semana los brotes ya asoman por la tierra.
Unos brotes tiernos que en estas primera fase servirá para que las gallinas puedan comer hierba fresca en un otoño donde no hay mucho verde donde comer.
Para su siembra se volteó la tierra para poder dejar una tierra suelta donde poder enterrar las semillas con un rastrillo. Las semillas que se quedan encima la tierra son comidas por los pájaros o recogidas por las hormigas.Una vez se tiran encima de la tierra como si de poner sal a una comida se tratase. Una vez tapadas se riegan. Ese riego permitirá que en pocos días las semillas germinen y comiencen a crecer. Un crecimiento que durará todo el invierno y terminará en mayo con las espigas de trigo listas para su recolección.
Las gallinas les encantan los brotes tiernos, luego cundo crezcan y sus hojas sean mas duras dejaran de comérselas y esperaran a las espigas para comer las semillas de trigo.