domingo, 28 de diciembre de 2014

Lección aprendida: barraca garrofón

barraca caída al suelo
El garrofón es un tipo de judía de enrame. Su crecimiento es  extremadamente rápido y crece trepando y extendiéndose ocupando todo lo que le rodea.
Es fundamental colocar tutores y crear una estructura tipo pérgola por donde suban y crezcan, de esta manera la recolección será fácil y cómoda.
Yo para las judías utilizo tutores de caña. Las cañas crecen en un rincón de mi huerto y cada año sobre el  mes de enero las corto y las guardo. Cuando son viejas o se encuentran muy deterioradas las troceo y las utilizo para encender el fuego de la chimenea.
Las cañas las coloco verticalmente clavadas en la tierra y uniéndolas en su parte más alta. Formando una estructura en forma de barraca o tienda de campaña.
Al pie de cada caña entierro una judía, esta germinará y trepara a través de la caña por si sola.
Este año utilicé las últimas 2 cañas de la barraca para plantar 2 semillas de garrafón.
Crecieron rápidamente adelantando el crecimiento de las judías. Durante el verano y otoño han ido invadiendo parte de la barraca y el vallado perimetral del bancal.
Han demostrado que son más resistente  y se adaptan mejor al clima y al ataque de hongos e insectos que el resto de variedades de judías.
Durante todos estos meses no han parado de crecer y crecer. Pero el volumen ocupado ha sido excesivo y el gran peso ha hecho que la barraco no soporte el fuerte viento  rompiendo las cañas y cayéndose al suelo.
He aprendido que para el garrafón la estructura necesaria tiene que ser más reforzada y en forma de pérgola  para repartir el peso.
Esta semana todavía es posible seguir recolectando garrafón, parece que su crecimiento a parado, pero seguirá hasta que las primera heladas terminen con ellas.


martes, 23 de diciembre de 2014

Ha llegado el momento de plantar ajos.


cabeza de ajos
Ya ha llegado el invierno y aunque las temperaturas parecen no quererle acompañar, la actividad en la huerta está muy reducida.
Uno de los últimos cultivos del año son los ajos. Me gusta plantar todos los años  ya que su cosecha te permite almacenarlos y disfrutar de ellos durante todo el año.
Este año he comprado ajos para la siembra ya que los recolectados en julio fueron pequeños y malos.
Se separan por dientes y se seleccionan los + grandes
Los he comprado en un comercio pequeño que me recomendaron y lo cierto es que vale la pena, tienen un buen trato gran experiencia y todos los productos y plantas necesarios para cada temporada.
Los ajos los venden en cabezas por kg. Para mi bancal con 2kg ha sido suficiente ya que habrán salido unos 180 dientes de ajos. Son ajos rojos con un tamaño bueno y olor intenso.
El lugar elegido es un bancas donde hace varios años que no se planta nada. No esta cercado pero los ajos son un cultivo que no les gusta a las gallinas y que no los tocan.
El caballón:
Se labra  y se prepara el bancal
El método elegido es el del caballón que consiste en realizar un montículo elevado de tierra, el bulbo se coloca en un lateral en la parte alta de manera que al regar la humedad es absorbida por la tierra pero sin encharcarse. El ajo crecerá  en este caballón con una tierra más suelta y menos aplazada que si los plantearemos sobre la superficie de la tierra. Las labores de escardado y limpieza de hierbas se realiza mucho más cómodo y rápido.
se preparan los caballones
El ajo no le gusta el encharcamiento y no necesita de muchos riegos.  La tierra tiene mucha humedad ya que todavía conserva el agua de las lluvias de hace7 dias y la niebla de las mañanas parece un riego nuevo cada dia. Por ello una vez sembrados no ha hecho falta regarlos.
La parte más ancha del diente del ajo es donde sacará las raíces y la parte más puntiaguda  es por donde sacará el tallo que romperá la tierra buscando la luz. No hay que plantar los muy profundos ya que si no les cuesta mucho salir.
Ahora ya solo queda esperar para ver como comienzan a asomar






lunes, 15 de diciembre de 2014

Los arboles que deciden descarsar.

Cuando las horas de luz se reducen y la temperatura baja la tierra se enfría. Ha determinados arboles les cuesta captar los nutrientes en estas condiciones, por ello su estrategia es entrar en un estado de reposo.
El árbol utiliza las hojas para trasformar el dióxido de carbono, agua  y otros nutrientes del suelo en otras moléculas necesarias para crecer y desarrollarse.
Estos arboles que no sobrevivirán a un invierno con bajas temperaturas  pierden las hojas y pasa a un estado de baja actividad.
Cuando las temperaturas vuelvan a ser favorables estos arboles volverán a retomar su actividad.

jueves, 4 de diciembre de 2014

Huevos de babosa?

Al retirar parte  del  acolchado de plástico que ha permanecido en el huerto desde principio de verano he descubierto que en la tierra hay un montón de huevos semienterados.
Desde un primer momento he pensando  que se tratan de huevos de caracoles, pero los huevos de caracol son más pequeños y más blancos. Además revisando debajo de las hojas de coles y pimientos no veo ningún caracol. La siguiente que se me ocurre es que sean huevos de babosas, les gusta la humedad que proporciona el acolchado de plástico, son nocturnos y por el día no se ven.
Hace algunas semanas que me pregunto quien estará estropeando las hojas y berenjenas.
Tal vez en estos huevos este la respuesta.

martes, 2 de diciembre de 2014

Plantando cebollino

Cuando siembras semillas de cebollas crecen agrupadas muy juntas. Se hace necesario trasplantarlas  y separar las cebollitas dándoles una distancia de unos 20cm de diámetro unas de otras. Hay que pensar que crecerán y formaran un bulbo de cebolla grande que requiere su espacio.
Desde siempre y por esta zona a la agrupación de cebollitas listas para trasplantar se le llama cebollino. Si
no quieres realizar tu propio plantel es fácil encontrar en viveros  y tiendas de plantas garbas de cebollino listas para plantar en tu huerto.
Es un cultivo fácil, que no requiere de mucho trabajo ni mantenimiento. El mayor trabajo se realiza el día de la plantación ya que hay que plantar una a una clavándola en la tierra.
Hay que recortar un poco las puntas de las hojas ya que su arraigo es así mejor.
Luego un buen riego asentará la tierra y la dejará lista para que las cebollitas puedan crecer.
Es uno de los cultivos que me gusta plantar en invierno, tal vez este año un poco tarde, pero dentro de unos meses conseguiré unas sabrosas cebollas.